Marta entre lo mejor de 2010, para El Caleidoscopio de Lucy

LO MEJOR DEL TEATRO 2010
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viernes 24 de diciembre de 2010
Lo mejor del teatro 2010

El 2010 continuó con el ritmo de crecimiento en la cantidad de obras de teatro pero como siempre decimos, la cantidad no hace a la calidad. La temporada empezó fuerte con “Un Dios Salvaje” y “La noche antes de los bosques” en La Plaza, con temáticas fuertes tanto con un elenco de cuatro actores (Peña-Onetto-Mirás-Goity) y un unipersonal a cargo de Mike Amigorena. Después, hubo un bajón importante, mechado con re-estrenos o nuevas temporadas de excelentes puestas como “Arlequino”, “Hotel Melancólico”, “Un hueco” o “Amentia”. Pero no había que preocuparse porque después si, aparecieron puestas de alto valor pero en los lugares más recónditos como “Quien sabe Marta”, la luminosa creación de Francisca Ure o “Dóciles y útiles”, un proyecto de graduación del IUNA, dirigido por Analia Couceyro. Estas dos puestas fueron de las más creativas del 2010. Otra de las gemas escondidas fue “Sobre piedras” con la tormentosa y pasional relación que unió a Auguste Rodin con Camille Claudell. La forma en que se llevó a cabo esta puesta y la pasión de la misma la ubica entre lo mejorcito del año. ElKafka alumbró su rica propuesta teatral con “Los Talentos”, con tres chicos con el intelecto a flor de piel pero sin capacidad para relacionarse con una mujer. Dentro de las obras que dividió aguas entre los periodistas que fuimos a verla (colegas…el teatro va más allá de la calle Corrientes, Abasto y Palermo Hollywood), está “Todos quieren lágrimas”, la visceral y violenta metáfora creada por Maximiliano de la Puente en torno al trabajo. El Bachín Teatro, acorde con el año del Bicentenario, presentó la corrosiva y excelente “Mariano Moreno y un teatro de operaciones”, con su arsenal de humor, ironía y visión política.
Los musicales pisaron fuerte este año con “Chicago”, “Avenida Q” y “Sweeney Todd”, pero a consideración de El Caleidoscopio, quien se lleva las palmas es “La Parka”. Con un elenco aceitado, frescura y mucha capacidad de trabajo, fue EL musical del año, en el que predominó el talento por sobre a la inversión realizada o al lugar del teatro.
“Borzoi” fue una de las pocas obras políticas del año. Con un ambiente ominoso y un bombardeo constante de conceptos en medio de una escenografía novedosa y creativa, la puesta era una creación de contenido abrumadora que, asi como empezaba, terminaba, logrando que el espectador quedase estupefacto frente a lo visto.
“Nomeolvides en la niebla” e “Incidente Nora” son dos puestas que se han destacado en un formato que uno podría decir “como las de antes” aunque la primera más ligada al melodrama y la segunda a una comedia de enredos. Con actuaciones sólidas, fueron una alternativa por demás valedera para los sábados a la noche. “UnosDos” era una fábula urbana y cotidiana sobre la soledad y de cómo una pareja sigue después de haber sido pareja. Basada únicamente en un texto y actuación, tanto Carolina Tejeda como José Mehrez crearon dos personajes entrañables, reconocibles y muy bien realizados. En medio de tanta multimedia y pseudo creación vanguardista que repite cliches hasta el hartazgo, viene muy bien un proyecto simple y contundente.
Javier Daulte presentó el proyecto “Vestuarios” con “Vestuario de hombres” y “Vestuario de mujeres” que, en un año con varios mundiales a disputarse, vino bien para lo que sería un pantallazo de la forma en que nuestra sociedad se refleja en justas deportivas de variada intensidad y prestigio. La forma en que se hace extensible lo ocurrido en los vestuarios a nuestro comportamiento cotidiano –tanto de un partidito con los muchachos como s virtudes argentinas como la solidaridad, la corrección deportiva y demás.
Antes de ir terminando con este raconto, recordamos a estos “hechos teatrales” que se convertirán, con el tiempo, en obras de culto, craneadas por la Compañía de Funciones Patrióticas. La Compañía se encarga de crear sus propias versiones de textos referenciales a acontecimientos políticos del país. El detalle es que se presentan únicamente en fechas patrias. Estimados amigos, estén con la antena atenta para presenciar la próxima función porque es de un disfrute inmenso, al tiempo que contenido, seriedad, ironía y buenas actuaciones. Este año presentaron “Política Casera” y “Tres jueces para un largo silencio”. Pedir más, ¡imposible!
Para el final, dejamos las que consideramos las dos puestas del año: “Cada una de las cosas iguales” y “Estado de ira”. La primera fue una fábula política, social y teatral dividida en dos actos en los que se apelaba al ejercicio del espectador para completar esa catarata de conceptos e imágenes que se escupían del escenario con frenesí y la exactitud de un metrónomo. En cambio, la segunda desarrolla el hacer teatro de una manera simple pero al mismo tiempo, de una elaboración ardua y artesanal. Frescura, seriedad y talento artístico fueron las armas de esta puesta genial que toma a un grupo de trabajadores municipales quiere hacer “Hedda Gabler”.